Camino al Club Andino


LA TRANQUILIDAD.

Ha vuelto la tranquilidad a la región. Como ese camino que se ve, así vuelve a estar Magallanes. Se recupera la natural tranquilidad de esta tierra. Hoy ha salido el sol, y seguramente, todos, nos sentimos un poquito mejor. Somos como plantas en Magallanes. El escaso sol de estos meses nos desentumece del frío cotidiano. Hasta camba el ánimo sentir o ver que el sol existe. No es fácil vivir en Magallanes. Con dos semanas sin sol, la depresión y el stres están ahí, a la vuelta de la esquina. No es díficil estar de malhumor o cansado si el día está nublado, frío, lento. Por esto y otras razones es que no somos iguales al resto. Pero hoy, hay sol. Miro por la ventana y los techos de los edificios contiguos, reflejan al señor que brilla. Por estos días se nos viene el Carnaval de Invierno. Es una hermosa fiesta típicamente invernal. Con carros alegóricos, murgas, batucadas, etc. Las calles del centro de la ciudad se abarrotan de gente. Hay que estar ahí y sentir durante dos o tres horas el contraste del frío (grados bajo cero) y la tibieza de un espectáculo muy bien presentado. Pero deberíamos hacer una fiesta al sol. Por ahí en Septiembre, cuando se le ocurre acercarse un poco más por estos lados, hacerle una fiesta, darle la bienvenida para que este año nos caliente un poquito más, y nos de más días de su luz. Digo, no.